Porcat, la Asociación Catalana de Productores de Porcino, ha anunciado que llevará hasta el Pleno Monográfico sobre Campesinado que tendrá lugar en el Parlamento de Cataluña los días 5, 6 y 7 de marzo la necesidad de afrontar la modernización de las granjas. 

Este es el primer punto que la asociación catalana de porcino defenderá, conjuntamente con el sector cárnico-ganadero, durante este pleno en el cual se quiere poner de manifiesto que el sector agroganadero catalán es un sector estratégico y esencial para la sociedad. 

Así, entre los puntos que defenderá promover la modernización de la producción cárnica y ganadera de Cataluña, facilitando las nuevas exigencias de bienestar animal y sostenibilidad ambiental, así como el consenso de todas las administraciones para evitar discrepancias entre ellas y, sobre todo, reduciendo y simplificando el exceso de burocracia -reclamación en la que PORCAT y el sector agroganadero hace muchos años que insisten-. 

En segundo lugar, hablará de proactividad en las instituciones europeas, para asegurar que las decisiones legislativas que se tomen sean realistas, viables y cuenten con el consenso de los sectores afectados y propondrá la creación de un grupo de trabajo con todos los eurodiputados catalanes con competencias que afecten los sectores ganaderos y cárnicos de Cataluña.

En tercero, pedirá trabajar con el Gobierno de España en un mecanismo de regionalización territorial que garantice el flujo de exportaciones internacional, refuerce la bioseguridad y que minimice el impacto económico.

En cuarto, recordará la necesidad de hacer un plan de control de la fauna salvaje, a través de la contratación de servicios externos especializado y, en particular, un plan de reducción del jabalí, que contemple una buena interlocución con los gremios de cazadores y con las industrias dedicadas a la comercialización de los productos cárnicos procedentes de fauna salvaje.

En quinto, pedirá el fomento de la implantación de medidas de bioseguridad en las explotaciones ganaderas y exigir, de forma estricta, las obligaciones normativas ya existentes, así como incrementar el control sanitario de las explotaciones y el control sanitario de los movimientos de ganado.

Además, llevará hasta el parlamento catalán el fomento de la alimentación saludable, la necesidad de una normativa que establezca la obligatoriedad de indicar el origen de la carne en los menús, el futuro de las normativas sobre bienestar animal o de medio ambiente, entre otros aspectos de relevancia para el sector.