Los mercados avícolas de más rápido crecimiento en el mundo son el sur de Asia y el sudeste asiático, con un pronóstico de crecimiento total combinado del 30% entre 2023 y 2030, una tasa de crecimiento anual del 4% al 5%. Esto marca una recuperación del lento crecimiento registrado entre 2020 y 2023, pero se mantiene por debajo de los niveles observados en la década de 2010.

El crecimiento está impulsado principalmente por las sólidas perspectivas económicas de la región, el crecimiento demográfico y un cambio en la preferencia hacia la carne de ave. Además del crecimiento del volumen, surgirán muchas oportunidades de valor debido al aumento de las redes y plataformas de distribución modernas, que incluyen ofertas de servicios de alimentos en rápida expansión, ventas de alimentos en línea y venta minorista moderna. Esto creará cada vez más oportunidades para agregar valor y estrategias de marca, según las estimaciones hechas por Rabobank.

La mayor parte del crecimiento hasta 2030 provendrá de la producción local. En varios países, las importaciones seguirán siendo relevantes, pero representarán menos del 5% de la oferta regional en general. La mayoría de los países están dando prioridad a la seguridad alimentaria, que apoyará la producción avícola local. Entre los países asiáticos, Tailandia seguirá siendo el único exportador, aunque India y Vietnam también podrían convertirse en importantes exportadores de aves de corral con valor agregado debido a su competitividad de costos.

Las perspectivas de crecimiento del volumen y el valor harán que las inversiones en esta región sean atractivas para los inversores locales, regionales y globales. Tal crecimiento requerirá una expansión y mejora significativas de las cadenas de suministro avícolas locales.

Se espera que la industria avícola tenga un aspecto diferente en 2030, a medida que se vuelva cada vez más moderna, internacional e integrada. Una disminución gradual de las ventas en los mercados tradicionales, junto con el crecimiento de los canales de distribución modernos, permitirá que surjan más líderes locales. Estos pioneros podrían empezar a desempeñar un papel en toda la región, primero en el sudeste asiático y gradualmente también en el sur de Asia.

En esta etapa del desarrollo de la industria, las empresas globales estarán interesadas en aprovechar el potencial de crecimiento de la región tanto en las partes ascendentes como en las descendentes de la cadena. Una estrategia alternativa es invertir en la región para desarrollar una plataforma de exportación –por ejemplo, invirtiendo en el liderazgo único de Tailandia en exportaciones de aves con valor añadido– o construir una segunda plataforma comercial en la región.

Además, debido a que la región no tiene un suministro local adecuado de ingredientes para piensos como maíz y soja, serán muy importantes las mejoras de eficiencia y excelencia operativa a nivel de las explotaciones agrícolas y a lo largo de la cadena de valor.