El asunto ha pasado a primera plana por la extrema situación por la que atraviesan los ganaderos en la actual zona de protección de 150km., que va desde la costa sudeste hasta Grimsby en el norte y al oeste hasta Leicestershire y Oxfordshire. Los animales se pueden mover dentro de la zona pero no pueden salir, lo cual está creando un gran problema debido a la falta de capacidad de los mataderos.

La Directora de la Asociación Nacional de Carne de Vacuno, Kim Haywood señaló que la mayoría de los establecimientos de finalización más importantes y especializados están dentro de la zona y les es imposible vender el ganado ya que sus usuales compradores se encuentran fuera de dicha zona. Dijo también que a los minoristas se les está privando de los proveedores más fiables.

El Grupo Core Stakeholders, que asesoran al Ministerio de Medioambiente, Alimentación y Asuntos Rurales británico sobre sus políticas de fiebre aftosa y lengua azul, está considerando diferentes opciones para aliviar este problema. Lo más sencillo sería permitir que los animales se trasladen a determinados mataderos fuera de la zona de protección. Esto podría constituir un riesgo innecesario, ya que la enfermedad parece estar ahora controlada en una zona de protección de lengua azul más pequeña.

Otra opción que se está debatiendo es extender la zona de protección hacia el oeste para poder utilizar más mataderos, lo cual es una medida que ayudaría a los ganaderos de la zona existente pero perjudicaría a aquellos en la zona extendida.

La alternativa más drástica, pero que se está considerando seriamente, es transformar toda Gran Bretaña en una sola zona de lengua azul. Siempre y cuando la enfermedad esté contenida en Suffolk esto es improbable que suceda, pero puede ser factible si la enfermedad se expande. La ventaja sería que permitiría el libre movimiento de animales a través del país.

No obstante, habrá consecuencias para las exportaciones de animales vivos: dichas exportaciones a otros países de la Unión Europea afectados por la enfermedad serán permitidas desde la zona de lengua azul, una vez que la prohibición a la exportación se haya levantado.

Las exportaciones de animales vivos a la mayor parte del mundo estarían prohibidas, a menos que los animales hayan sido vacunados o se haya alcanzado un acuerdo específico.

Por otro lado, se acaba de publicar el primer informe epidemiológico de lengua azul, que se basa en la situación de la enfermedad hasta el 19 de octubre. Dicho informe concluye que es probable que la infección se haya introducido inicialmente en Norfolk, Suffolk y Essex en la noche del 4 y 5 de agosto, por una transmisión a través del viento causada por mosquitos infectados provenientes de Europa continental.

El informe también describe los generalmente bajos índices de mortalidad y prevalencia en los animales infectados. La mayoría de los establecimientos infectados tienen un solo animal infectado y la prevalencia es generalmente baja.

Los controles y las pruebas continúan, al objeto de poder comprender la extensión geográfica de la infección de lengua azul y para determinar la prevalencia de la enfermedad en manadas y rebaños.